Pasar tiempo en casa es una oportunidad perfecta para desarrollar la creatividad y fomentar la diversión en familia. Una de las actividades que más divierten a los niños es disfrazarse. Se trata de un juego seguro, que nos ayuda a despertar la imaginación y a enseñar a los más pequeños valores como el respeto al medio ambiente, con la reutilización y reciclaje de materiales. Además, si diseñamos y confeccionamos los disfraces en casa, ayudaremos a los niños a mejorar su psicomotricidad fina y su capacidad espacial y de abstracción. Con los disfraces caseros para niños conseguiremos crear recuerdos felices que podemos inmortalizar con una divertida sesión de fotos.
Los disfraces caseros más fáciles y originales para niños
Los disfraces caseros originales para niños deben ser sencillos de elaborar para que los más pequeños puedan implicarse en su confección: ¡es parte del juego! Para hacer disfraces caseros fáciles lo mejor es reutilizar materiales que tengamos en casa, ya sean cartones, papeles, fieltro, bolsas o lo que se os ocurra. Con algunos útiles básicos como tijeras, cinta adhesiva, pintura o una pistola de silicona, las posibilidades son infinitas.
En las profundidades marinas
Uno de los disfraces más originales y caseros es el de buzo. Tan solo necesitas unos leggins y una sudadera con capucha como base. Las bombonas de aire las haremos pintando de plateado unas botellas grandes de refresco que ataremos a la espalda con unos tirantes que haremos con velcro de doble cara o cinta americana. Para hacer el cinturón, usamos latas de conserva vacías de tamaño pequeño que limpiaremos bien para quitar las etiquetas. Las de tomate frito o aceitunas van geniales. Completa el look con unas gafas de natación y con unos peces hechos de fieltro o cartulina pegados o grapados al disfraz.
Qué sana es la fruta
Uno de los disfraces caseros más fáciles es el de racimo de uvas. Solo necesitas unos cuantos globos verdes, morados o amarillos que una vez inflados se pegan sobre la ropa, preferiblemente unos leggins y una camiseta. Con una diadema haremos un sarmiento para colocarlo en la cabeza. Pinta de verde un trozo de papel de horno, retuerce como un tirabuzón para darle forma de rabito del racimo y pégalo a la felpa. ¡Ya tienes tu disfraz!
Directo del espacio
Si tienes papel metalizado en casa y algo de purpurina apta para maquillaje, prácticamente tienes este disfraz hecho. Vestíos de negro y pegad adornos hechos en papel metalizado o de aluminio como estrellas o cometas. También podéis usar globos pequeños que hagan de planetas. Completa el disfraz con un maquillaje galáctico con purpurina.
Nos vestimos de mamá y papá
Este es el disfraz más sencillo de la historia, pero para los niños es muy divertido imitar a los adultos. Dejad que usen vuestra ropa y se disfracen de papá o mamá, así de fácil. Para rizar el rizo, los adultos pueden vestirse de niños.
Los disfraces caseros para niños son geniales para disfrutar en casa. No te olvides de inmortalizar estos momentos de diversión con tus hijos con un álbum de fotos original. En Recuerding tenemos los álbumes perfectos para que no se os escape ningún recuerdo entrañable del tiempo que pasáis en familia.